La Barbería es uno de los más antiguos de la historia, su origen se remonta a los antiguos egipcios. Tanto en la cultura egipcia como en la romana y en la antigua Grecia, el barbero era un hombre de gran importancia en la sociedad, distinguido y respetado. Se creía que en el cabello residía todo y que al ser afeitado se eliminaba lo malo del ser humano y se llegaba otra vez a la pureza y limpieza. Si quieres más detalles sobre el orígen de la barbería continúa leyendo.
Hace más de 3500 años…
El origen de las barberías se remonta a la edad de bronce. En aquellos tiempos, hace más de 3500 años, se usaban piedras afiladas a modo de cuchilla.
Los egipcios modernizaron los métodos, y algunas esculturas encontradas demuestran que el afeitado del cuerpo entero era un ritual regular entre los faraones y la alta sociedad.
La Barbería en la Edad Media
Si avanzamos unos cuantos siglos nos encontramos que en la Edad Media eran los sacerdotes los más ilustrados, tanto en el hábito de leer y escribir como en el manejo de los utensilios de medicina.
Los barberos eran de los pocos diestros en el manejo de cuchillas y bisturís, así que la Iglesia les delegó la práctica de la medicina. Increíble, éramos considerados médicos que hacíamos mucho más que retirar el cabello.
Por suerte, el parlamento británico decidió poner un poco de sentido común a aquello en 1450, y limitó estas operaciones a las terroríficas sangrías, la extracción de muelas, y por supuesto, el corte y cuidado del cabello.
Precisamente de las sangrías nace el barber post (la piruleta de toda la vida), que en su origen mostraba solamente franjas rojas y blancas, simbolizando la sangre que emanaba de esas extracciones y las vendas limpias que se usaban para secar la herida practicada.
La introducción del azul, sin embargo, no está claro a qué responde.
Barberos para pelar pelucas
La llegada de las ostentosas pelucas de la clase alta del siglo XVII exigió a los barberos perfeccionar sus técnicas, antesala de lo que es ahora este arte.
Barbería en la modernidad
La creación del primer gremio moderno de barberos, la estadounidense Associated Master Barbers of America (AMBA) en Chicago en 1924, ofreció a este oficio el impulso necesario para alcanzar su década dorada, en la primera mitad del siglo XX.
Entre los años treinta y sesenta las barberías fueron el lugar de culto por excelencia de muchos hombres (las mujeres no podían entrar). Era el punto de encuentro donde se reunían en largas conversaciones para pasar su tiempo libre.
La barbería siempre ha sido y siempre será un lugar de encuentro, de tertulia.
Actualmente las barberías han dejado de ser ese lugar de culto solo de hombres hombre y vuelve a cobrar gran relevancia este oficio para ambos géneros.
Han surgido nuevas modas y tendencias en relación a las barbas, nuevos looks que apuntan a una época dorada de las barberías. En los últimos diez años se ha devuelto al cabello el protagonismo que tuvo desde sus inicios.
Y hablando de volver a los inicios, si te duele una muela, no dudes en darte una vueltecita por El Barbero de la Habana para mirar esos hermosos dientes “al Son de las Tijeras” (jajajajaja estoy de broma).